Diferencias económicas alejarían al zaguero de los azules. Toluca le busca club en México. Puebla es uno de los interesados.
Osvaldo González asume que podría estar viviendo sus últimas semanas en Universidad de Chile. El penquista forma parte de la nómina de los jugadores a quienes ni el club ni Marco Antonio Figueroa les pondrán trabas para partir a fines de año.
El defensor explica que “mi continuidad acá depende de Toluca (dueño del 75 por ciento de su pase). Ellos prefieren que busque un equipo en México. Ha venido gente de Puebla a verme, pero aún no hay algo claro”.
Sin embargo, aclara que su intención es quedarse. “Pero la ‘U’ no ha hecho nada para que siga acá. Veo complicado continuar. Además, me prometieron algo y después me cambiaron todo”.
El jugador formado en Universidad de Concepción alude a los bonos pactados con la dirigencia que, hasta el fin de su contrato, a mediados de 2015, completarían 500 mil dólares. De esa cifra, recibió la mitad. En septiembre, el beneficio cesó y el salario del futbolista se redujo drásticamente. “Siempre conté con esa plata”, insiste “Rocky”.
González prefiere no atribuir la decisión directiva a su falta de continuidad, debido a sus constantes lesiones, la última un esguince en la rodilla derecha. “He jugado poco, pero no es porque yo quiera. Me lesioné jugando. Me ha costado recuperarme, pero ha sido por la pubalgia”, puntualiza.
Además, cierra la opción a un nuevo diálogo con Azul Azul. “Ya no hablo más con ellos”, sentenció.
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